El pasado jueves 20 de febrero, la librería Sin Tarima de Madrid acogió la presentación de El ataque de las cabras, la primera novela de Laura Chivite (Pamplona, 1995), publicada por Penguin Random House.
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La escritora Laura Chivite, que en 2022 se alzó con el Premio Ojo Crítico de Narrativa por su libro de relatos Gente que ríe (Caballo de Troya), regresa con una historia que oscila entre lo cotidiano y lo fantástico, entre el humor y la melancolía. En conversación con la también escritora Julia Viejo (Madrid, 1991), la presentación fluyó entre risas y divagaciones, con la misma frescura y espontaneidad que caracterizan su escritura.
Desde el inicio, quedó claro que esta no sería una presentación convencional. Viejo rompió el hielo lanzando un juego inesperado a Chivite: “Imagina que eres una cabra. Te llamas Juana, eres escritora y escribes con las pezuñas”. La ocurrencia provocó carcajadas y marcó el tono del evento: una charla distendida, donde el humor tuvo tanta presencia como lo literario.
Porque, aunque el título pueda sugerir lo contrario, El ataque de las cabras no es una historia sobre cabras, o al menos no solo sobre ellas. La novela es una historia de crecimiento y una crónica familiar que combina humor y desencanto a medida que la protagonista desentraña los secretos de su familia. “Quería escribir sobre una tía y su sobrina porque es un vínculo muy poco explorado en la ficción”, explicó Chivite. Su inspiración vino de su propia adolescencia, cuando vivió con su tía Bea, aunque dejó claro que la historia no es autobiográfica (por si alguien se lo preguntaba).
Julia Viejo y Laura Chivite en SinTarima
Si bien la novela contiene elementos fantásticos, estos no son el centro de la historia, sino recursos narrativos que surgen de forma natural. La autora explicó que en ningún momento partió con la intención de escribir un relato fantástico, pero ciertos elementos, como la telequinesis de la tía Lidia, aparecieron como una forma simbólica de representar emociones o situaciones. “Me di cuenta de que a veces lo mágico es la mejor forma de explicar la realidad”, comentó Chivite. Sin embargo, también hay elementos que surgen simplemente por placer narrativo, sin una justificación más allá. “El vampiro no tiene ninguna explicación. ¿Por qué no?”, bromeó la autora.
La conversación avanzó hacia las influencias literarias de Chivite, que van desde el realismo mágico latinoamericano hasta la literatura contemporánea anglosajona. Los vivos y los muertos de Joy Williams, Poderes de Alice Munro o la última novela de Lorrie Moore, Si este no es mi hogar, no tengo un hogar, fueron algunas de las referencias que mencionó la autora. “Me di cuenta de que muchas de mis lecturas recientes combinaban lo real con lo fantástico, y creo que esa mezcla terminó filtrándose en la novela”, explicó.
Pero más allá del juego literario, El ataque de las cabras es una novela sobre el desencanto, sobre la inevitable caída de los mitos personales. La relación entre la narradora y su tía Lidia, construida desde la admiración y la complicidad, se va transformando a medida que avanza la historia. “Todo lo que idealizamos en algún momento tiene que caer”, apuntó Chivite. En este sentido, la novela no solo retrata una relación familiar, sino también el paso del tiempo y la manera en que las certezas de la juventud se van desmoronando.
Al final, como dijo la autora, el juego con lo fantástico no es solo una cuestión de estilo, sino otra manera de narrar la vida. “Es un recurso para hablar desde otro punto de vista. No sé si hay que hablar de la realidad, porque, ¿existe una realidad? Pero bueno, eso sería otro debate”.
La novela es una historia de crecimiento y una crónica familiar.
El evento cerró con un aplauso largo y una invitación colectiva a seguir la celebración en el bar Parrondo, porque, como bien se dijo en la presentación, después de tanto hablar de cabras y libros, lo lógico era irse a beber.
El ataque de las cabras
Laura Chivite
Literatura Random House, 2025
176 pp.
18,90 euros.
