Ramón Bascuñana propone en Anotaciones a pie de página (Pre-Textos) un conjunto de poemas breves con versos redondos, planteado como un único discurso en torno a la dupla vida y poesía.
© JESÚS CÁRDENAS
La intertextualidad ocupa espacio en la bibliografía contemporánea, desde los estudios de Bajtin. No sólo nos lleva a las citas sino que en un sentido amplia sirve para refrescar la tradición literaria. Algunos poetas han llevado hasta sus últimas consecuencias, regando de citas todo el conjunto. Y aún más: hay poetas que crean una distorsión al aislar su creación aparte. Ese aislamiento nos descubre y nos revela el sentido del texto creado, que no es otro que dar cuenta de la propia creación poética.
Anotaciones a pie de página (Premio Juan Gil-Albert XL Premios Ciutat de València, Pre-Textos) es un conjunto de poemas que se ubican en el cuerpo de las anotaciones, por lo que los textos creados dialogan con las citas. Una disposición tipográfica sorprendente, sin duda.
Ramón Bascuñana (Alicante, 1963) tiene una trayectoria poética digna de mención a lo largo de más de dos décadas de publicaciones, desde Hasta ya no más nunca (1999), acumula más de una veintena de poemarios publicados, muchos gracias a la consecución de premios. También cultiva los cuentos y los relatos con dos libros publicados hasta la fecha.
Ya en Impostura (2006) tomaba la voz de una serie de poetas. El poeta alicantino muestra su habilidad en Anotaciones a pie de página, porque el diálogo con las citas conforman la misma vida del autor (Brines, Cernuda, Maillard, Heaney, Valéry, Albert Einstein, Carlos Ann…). Un poema por cada cita. Así pues, el lector queda embargado por la cita y ha de buscar el poema creado. Esta fórmula despierta curiosidad.
El conjunto no posee divisiones porque se plantea como un único discurso, de ahí que los poemas de Bascuñana se identifiquen no por el título sino por el complemento textual. Son versos evocadores, capaces de prolongar o desviarse del texto aludido. Todos los poemas se presentan compactos, breves (algunos apenas superan la veintena de versos).
Una sucesión de textos cuyos motivos principales se alían en torno a la dupla vida-poesía. En torno a esa aleación figuran el tiempo, el amor o el miedo. Así, estos temas secundarios van cruzando el libro sin ramificar el tronco común. Por ello, nos hallamos ante una estructura orgánica y bien cohesionada. En suma, una poesía que combina lo confesional con un lenguaje metapoético.
La única fe a la que se agarra el sujeto son las palabras.
Sobre el acto de escribir Bascuñana dirá que es balsámico, que “Escribir suele ser para cobardes / que no aceptan que la inmoralidad y la culpa / son taras de los hombres”. Y más adelante, se muestra así de taxonómico, integrado dentro del propio poema: “Es terrible. Existo porque escribo. / Fuera de mí el mundo se disipa. / No existe nada fuera de mis versos. / Soy el cuerpo y el rostro que tienen mis poemas”.
De la propia existencia creada en el poema, el sujeto se formula en contra de la vuelta al pasado: “El retorno al pasado / es una senda triste y escarpada”, escribe en el primer texto. Aunque para escribir es vital la perspectiva: “Quizás por eso escribo / versos que hablan / de mí mismo como si fuese otro”.
Con todo, como en la vida, en el desarrollo de la escritura el poeta suele ir envuelto por la incertidumbre, con la sombra del misterio y merodeando el fracaso, porque al fin y al cabo importa el proceso: “Eso nunca se sabe. / uno sabe que empieza el poema, / pero sin la certeza / de saber dónde acaba. / El poeta es un topo horadando la tierra / con túneles secretos”. También comunica que la labor del poeta es oscura, solitaria, instintiva.
Bascuñana (Alicante, 1963) empezó a publicar en 1999.
La única fe a la que se agarra el sujeto son las palabras. El poema se nos aparece como un texto abierto, inconcluso, sólo terminado por los lectores. La creación del poema resulta, en analogía, una prolongación de la vida. En la tarareada inutilidad del arte de la palabra busca sentido la vida; en cambio obtiene un resultado monótono, un supuesto acto de creación inútil que lleva a enaltecer la realidad, cuyo destino se acepta: “Tú quisiste ser alguien / […] Más que un poeta, / quisiste ser poema / […] Pero has llegado a un punto del camino / en donde ya no sabes / si escribir justifica / el tiempo de derrota que te queda”.
Asimismo, la realidad tiene otras aspiraciones, otras metas, y cada vez nos parece más hostigadora: “Cada verso un disparo o una puñalada. / Legítima defensa / contra la realidad que nos acosa”. De la tensión del poema, como de las experiencias vitales, brota el silencio, también “refugio seguro”, se agarra a la esperanza, al optimismo que le ofrece el lenguaje poético: “Y ese algo más grande en lo que creo / no es otra cosa que la poesía”.
Los temas principales se alían en torno a la dupla vida-poesía.
En suma, Anotaciones a pie de página acumula versos redondos, poemas breves y una expresión depurada para un conjunto con una disposición que sorprende a los lectores, generadora de misterio, con el que ofrece a sus lectores Ramón Bascuñana.
Anotaciones a pie de página (Premio Juan Gil Albert XL / Premios Ciutat de València), Ramón Bascuñana, 2023, Pre-Textos. 60 pp.
EL AUTOR
JESÚS CÁRDENAS (Alcalá de Guadaíra, Sevilla, 1973) es profesor de Lengua Castellana y Literatura. Licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Sevilla.
Como investigador literario, ha escrito ensayos y dado conferencias sobre Juan Ramón Jiménez, Antonio Machado, Vicente Aleixandre, Luis Cernuda, García Lorca, Pier Paolo Pasolini… Como crítico literario colabora con reseñas en diferentes revistas literarias.
Hasta la actualidad es autor de los libros de poemas: La luz de entre los cipreses (Sevilla, 2012), Mudanzas de lo azul (Madrid, 2013), Después de la música (Madrid, 2014), Sucesión de lunas (Sevilla, 2015), Los refugios que olvidamos (Sevilla, 2016), Raíz olvido, en colaboración con Jorge Mejías (Sevilla, 2017), Los falsos días (Granada, 2019) y Desvestir el cuerpo (Madrid, 2023).
