El ensayo de Juan Luis Conde (Salmanca, 1959) compara la retórica clásica europea y china para mostrar cómo su distinta evolución condicionó formas de poder, persuasión y debate. Conde, en un trabajo fascinante y ameno para todos los lectores curiosos, analiza autores chinos antiguos, la importancia de la escucha y la manipulación del discurso que padecemos hoy.
© MIGUEL ÁNGEL SERRANO
Hay veces en las que el descubrimiento de un saber antiguo fabrica un convincente escenario de la modernidad. Algo así ocurre con este ensayo de Juan Luis Conde, Convencer o morir, que aborda un tema que puede parecer demasiado técnico pero que, tratado de la manera en que lo está, resulta muy estimulante y de lectura no tan densa como pudiera parecer.
Conde se apoya en bibliografía de otros países europeos que han abordado con algo más de profundidad las diferencias entre el modo retórico clásico europeo y el chino. Por otra parte, el autor, además de latinista, tiene un sólido conocimiento de la cultura china y especialmente del lenguaje retórico y su uso por parte de los poderosos, asunto que ya ha tratado en su obra.
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El eurocentrismo probablemente nos ha impedido ver cómo la distinta evolución del arte de la persuasión en ambas culturas ha dado en modos de actuación sociales y etológicos diferentes. Conde dedica todo un capítulo a la inexpresividad como parte del discurso (del mismo modo que lo es el silencio) y cómo eso condiciona el juego dialéctico. En realidad, el autor dibuja la idea de que la dialéctica, el debate, son parte inseparable de la retórica en la concepción clásica china: se convence escuchando. Y esto es relevante hoy en nuestras sociedades, en las que ningún discurso es ya unívoco y todo emisor sabe que puede ser contestado por los lectores u oyentes.
La tarima se ha ido aplanando y eso ha cambiado muchas concepciones sobre el poder autoritario. Ahora se manipula el discurso para ofrecer todas las versiones, en un retruécano que dicta que el poder es información. Es casi irónico que se llame Ejército chino de los 50 centavos a la inundación de las redes sociales por parte de trolls contratados por el gobierno chino para opinar a su favor: la estrategia ha desembocado en lo que se conoce como astroturfing: ya no es exclusiva del gobierno chino, sino que todo tipo de estamentos han aprendido la lección.
Convencer o morir, que lleva por subtítulo El peligroso arte de la política en la época dorada de la China antigua, es una descripción de las danzas entre gobernadores y consejeros, de incierto destino estos: es en realidad un interesante recuento de estrategias y una relación de los diálogos que pueden darse entre el poderoso y el consejero, que debe ser cauto para no perder la voz por el método expeditivo de hacerlo junto con la vida. Conde analiza las enseñanzas de tres autores clave, Guiguzi, coetáneo de Aristóteles, Lü Buwei y Hanfeizi.
El libro abre un feraz campo de aprendizaje sobre el alma china.
Para el lector más versado en retórica europea el libro es un festín, porque podrá conectar rápidamente algunas de las enseñanzas chinas con las que maestros clásicos o renacentistas nos han legado: por ejemplo, que el éxito de un discurso depende de la repetición y de la elocuencia, como saben bien los políticos, o que la retórica en sí misma es un arma (la de los débiles, la que se maneja con la mano izquierda, como bien defiende el autor), tal como se la dibuja en el siglo XV, aunque en este caso sosteniendo la espada en la diestra.
Pero interesa destacar que el libro abre un feraz campo de aprendizaje sobre el alma china, más fluida probablemente que la europea y con mucha mayor tolerancia a la polisemia: basta ver cómo los traductores a lenguas europeas se las ven y se las desean para dar una versión unificada de algunos textos. Y sobre la necesidad de la escucha, casi con mayor rotundidad que el habla: la persuasión también consiste en ajustar el consejo a lo que el gobernante, o el auditorio, pueden soportar. Solo los sabios aprenden…
En definitiva, un tratado sobre la consejística que resulta instructivo y fascinante y que se convierte en una lectura no solo provechosa sino entretenida y curiosa. Conde, latinista de pro, parece cumplir aquel antiguo mandato horaciano: docere et delectare.
Convencer o morir. El peligroso arte de la política en la época dorada de la China antigua, Juan Luis Conde, Ed. Arpa, 2025, 216 págs., 19,90 euros.
EL AUTOR
MIGUEL ÁNGEL SERRANO (Madrid, 1965) es narrador, poeta, crítico literario y ensayista y presidente de la European Writers Council (de la que es miembro ACE). Colabora habitualmente en medios como columnista y crítico literario. Obra: La Ciudad de las Bombas. Ensayo histórico. Ed. Temas de Hoy, 1.997. Tango. Novela. Premio Pereda de Novela Breve del Gobierno de Cantabria 1998. Ed. Pretextos 1.998. El veneno del profundo pesar. Relato. Finalista Premio Vargas Llosa NH de relatos. Edición no venal NH Hoteles. 2.002. Traducido al inglés por Bianca Southwood. Jardín de Espinos. Novela. Prólogo de Antonio Muñoz Molina. Ed. Dilema. 2.004. El hombre de bronce. Novela. Ed. El tercer nombre, 2.009. Su último libro publicado es el poemario Un presagio (Bartleby, 2013). @poesajes / poesajes.com
