Rafael Cadenas, el poeta que aviva los silencios del alma

El premio Cervantes 2022 homenajea a Rilke con unos poemas que son también un homenaje a la precisión, a la mirada concisa que en su humildad expresiva trata de captar la belleza del mundo.
© JOSÉ ANTONIO SANTANO

Escribe José Iniesta: «Soy poeta por necesidad, y no me queda otra. Es la mejor manera que tuve de atravesar las sendas del hambre (…) La poesía pretende la eternidad, constata los derrumbes, manifiesta lo invisible, le da voz a la nada. Destruye las fronteras. (…) La poesía me concedió conciencia de la luz y el aire, una rebeldía descalza en el camino, la resistencia contra la destrucción. (…) Una mirada que cree, eso es poesía, y es consolación, la fuerza de todo lo que fluye y es murmullo».

Así es. La mirada del poeta trasciende lo real para construir sueños, mundos de asombro.

Edita Galaxia Gutenberg

La verdad llega desde el abismo para transformarse, crecer lentamente junto a un frondoso árbol y ser son y vida. Algo de todo esto ocurre cuando nos acercamos a la voz del poeta, en esta ocasión, a la de Rafael Cadenas (Barquisimeto, Venezuela, 1930) en su libro A Rilke, variaciones, con prólogo de Jordi Doce y publicado por Galaxia Gutenberg.

De la obra poética de Cadenas caben destacan libros tales como Los cuadernos del destierro (1960), Falsas maniobras (1966), Intemperie (1977), Memorial (1977), Amante (1983) o Sobre abierto (2012). Ha sido galardonado con el Premio Nacional de Literatura de Venezuela (1985), el Premio Internacional Federico García Lorca (2015), el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2018) y el Premio Cervantes en 2022, lo que avala sobradamente su trayectoria poética.

Cadenas es un poeta alejado del concepto de poesía como artilugio, porque y así lo indica Jordi Doce en el prólogo: «La poesía de Cadenas es un ejercicio de sabiduría velada que no quiere deslumbrar, sino iluminar, hacer camino y mostrarlo. Pocas veces en nuestro idioma la palabra se presenta tan desnuda, tan inerme y vulnerable. Ningún poema puede leerse de manera superficial o desatenta, pero aquí más que nunca hay que extremar el cuidado y fijarse en los silencios, las pausas, el carácter en ocasiones tentativo de muchos fragmentos, su aversión a un decir fácil, su miedo a incurrir en flatulencias retóricas y falsa brillantez».

Cadenas se despoja de la grandilocuencia del lenguaje.

Y, ciertamente, el poeta y el poema se desnuda para perturbar al lector. La voz lírica se transfigura para crecerse sobre sí misma hasta alcanzar el ansiado paraíso de la palabra en todas sus «variaciones» y matices. Para ello, Cadenas toma como modelo el poema breve, ese que en su esencia determina y se ofrece al lector sin máscara alguna y que, incluso, puede consistir en una frase. La poética de Cadenas sobrevuela el cielo de la concisión y la belleza sin perder su sentido más humano.

En A Rilke, variaciones hallamos al verdadero Rafael Cadenas, poeta y hombre, que parte de lo aprehendido en la poesía de Rilke y en todos sus aspectos existenciales, para al final reencontrarse con él mismo, con su sombra, conteniendo en la palabra todos los caminos del mundo: «Tu poesía nos alecciona / para dar con un ver desnudo / que nos devuelve lo que es». Cadenas dialoga con Rilke, se abraza a su palabra, se desprende del yo para convertirse en ese tú, esa voz poética que ya no es sino el otro en su más alta expresión.

Rafael Cadenas fue galardonado en 2022 con el Premio Cervantes de Literatura.

El poema, entonces, es sutil como un murmullo, casi un silencio creciente que desciende a lo más profundo del ser: «Un día / te residenciaste / en el momento / que no cesa de fluir». Cadenas se despoja de la grandilocuencia del lenguaje para abrir el camino hacia un lugar misterioso, donde habita el asombro en su luz primigenia. Todo se aparece y desaparece, el mundo se aloja en la palabra, tan desnuda como el aire, que fluye por doquier y se cose al alma para siempre: «…todo por el poema / pero más bien / por lo que el poema no dice / todo por la hora / que se separa del tiempo / todo para aceptar / pero no sin antes / dar con el espacio del rescate».

La poética de Cadenas sobrevuela el cielo de la concisión.

La palabra siempre como destino en Cadenas para cantar a la vida, su vida, esa que se acerca a la próxima y definitiva parada, pero que trasciende el tiempo en esa búsqueda constante del silencio que brama en el silencio: «Tu palabra no cesa de buscar / a los que se desheredan / ellos mismos del Todo». A Rilke, variaciones es un libro que debe leerse lentamente, degustando cada una de las palabras que lo contienen y asombran, que nos turban y nos abrazan, y su autor, Rafael Cadenas, el gran poeta que aviva los silencios del alma.

 

A Rilke, variaciones, Rafael Cadenas, prólogo de Jordi Doce, Galaxia Gutenberg, 2024, 80 páginas, 11 €.


 

EL AUTOR

JOSÉ ANTONIO SANTANO (Baena, Córdoba, 1957) cultiva la poesía, narrativa, ensayo y crítica literaria. Es licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Almería, y autor de más de veinte libros, entre los que destacan Profecía de Otoño; Exilio en Caridemo; Suerte de alquimia o Tiempo gris de cosmos, todos ellos galardonados con prestigiosos premios.