Biografía de una mirada

Valérie Mréjen (París, 1969) regresa con una nouvelle en la que cuenta cómo se fue perfilando su particular mirada en sus primeros años de formación como artista.  
© REBECA GARCÍA NIETO

 

Valérie Mréjen es artista visual además de escritora, y eso se nota mucho en todo lo que escribe. Sus libros son como relatos filmados, o, como se ha dicho, nouvelles rodadas en Super-8. En ellas muestra hechos cotidianos, generalmente extraídos de su propia vida, desde una perspectiva atípica. En su anterior novela, Tercera persona, escribió sobre los cambios que produjo en ella la maternidad.

Desde el nacimiento de su bebé, un mundo que parecía recién estrenado se abrió ante sus ojos, y por extensión ante los ojos de los lectores. En el libro que ahora nos ocupa, la francesa cuenta cómo se fue gestando esa peculiar forma de percibir las cosas que la caracteriza; es decir, traza la historia de su mirada. En ese sentido, es un complemento perfecto a sus otras novelas.

Edita Periférica

La joven artista empieza y termina con un trayecto en tren: el que lleva a la protagonista a la prueba de acceso de una prestigiosa facultad de Bellas Artes en las afueras de París y el que la lleva a presentar un vídeo ante otros compañeros clase.

Entre un trayecto y otro, la autora hace un recorrido por las obras de artistas a los que admira (Chantal Akerman, Georgia O’Keeffe, Giorgio Morandi, Martha Rosler o Jenny Holzer) y habla de sus primeros intentos de construir un lenguaje visual que la distinga de sus compañeros y de los artistas que la preceden: «Tendremos que labrarnos un camino aún sin señalizar, crear un mundo con materiales que nosotros mismos compraremos, que elegiremos por instinto o que encontraremos sobre la marcha, elementos que deberemos reunir tratando de mostrar inventiva».

Una de las obras en las que Mréjen se detiene es la frase que la artista Jenny Holzer hizo colocar en un edificio de Times Square en 1982: «Protect me from what I want» [Protégeme de lo que deseo]). A partir de esta plegaria de Holzer, Mréjen nos hace partícipes de sus propios ruegos.

Es entonces cuando alude a hechos biográficos ya conocidos por sus lectores, como el fallecimiento prematuro de su madre («Protégeme de esa alegría que siento que me está vedada, al menos durante un tiempo, el que tarde en asimilar la culpa de seguir viva cuando mi madre se ha ido tan joven, tan hermosa y aún llena de futuro sin haber experimentado realmente todo lo que ahora sueño yo con conocer») o la asfixia de tener un padre excesivamente protector («Protégela de ese entorno de jóvenes, de los marginados, de los peligrosos drogadictos, de la lujuria en general (…). Protégeme, se dice ella en secreto, como un joven e inexperto papagayo, al tiempo que intenta justificar los temores, elevados a la enésima potencia, de su padre»).

   La rivalidad y los celos marcan las relaciones en el mundo del arte.

No obstante, si en anteriores novelas su familia ocupaba un lugar privilegiado (en Eau sauvage el padre llevaba la voz cantante del relato; en Selva Negra fantaseaba con un reencuentro con su madre fallecida), aquí es su familia de adopción, la de los artistas profesionales, la que tiene el papel principal. Para hacerse un hueco en el mundillo del arte, es imprescindible hacer contactos y tratar de destacar sobre sus compañeros. Eso hace que, aunque la autora las retrate con humor e indulgencia, las rivalidades, los celos y la envidia sean el telón de fondo de todas sus relaciones en este ámbito.

Valérie Mréjen archivos - Editorial Periferica

Mréjen es escritora y artista visual

Se ha comparado la obra de Valérie Mréjen con los documentales autobiográficos de Chantal Akerman. La comparación parece acertada. De hecho, en La joven artista reconoce que News From Home produjo en ella un «estremecimiento estético» en su juventud. En dicho documental, Akerman superponía las cartas que le enviaba su madre desde Bruselas a una serie de largas tomas rodadas en Nueva York; de esa forma hacía coexistir dos espacios prácticamente antónimos: la tranquilidad e intimidad del hogar y el anonimato y bullicio de una ciudad como Nueva York.

Esta aproximación indirecta, y parcial, de Akerman a su propia vida (la voz en off solo comparte con el espectador las cartas que le envía la madre, no las de la autora) es comparable a la que la francesa lleva a cabo sobre el papel. Hay, sin embargo, algo que diferencia a Mréjen de otros artistas, incluida Akerman, y es que concede un mayor protagonismo a las palabras. En realidad, todas sus obras, incluidas las visuales, giran en torno a la escritura y el lenguaje.

        La obra de Mréjen se ha comparado con el cine autobiográfico de C. Akerman.

Aunque su literatura puede catalogarse de autobiográfica, Mréjen escribe sobre sí misma desde un encuadre inusual, bien sea parapetada tras la tercera persona o diluyendo su presencia en un indeterminado «nosotros». Este peculiar ángulo desde el que (se) mira produce cierto extrañamiento en el lector —al parecer, sus obras visuales se caracterizan también por un leve «desencuadre»—.

Por otro lado, para que el lector se fije únicamente en las palabras, y no en los afectos que las acompañan, siempre ha optado por una prosa más bien aséptica. Esta opción estética es para mí lo más atractivo de su propuesta, muy diferente de otras narraciones más convencionales. Aun así, tal vez por la ligereza del tema del que se ocupa en esta ocasión, La joven artista me ha interesado menos que otras novelas de la autora, como Selva Negra o Tercera persona.

 

La joven artista, Valérie Mréjen, traducción de Vanesa García Cazorla, Periférica, 2024, 140 páginas.


EL AUTOR

REBECA GARCÍA NIETO (Valladolid, 1977) es escritora y traductora literaria. Además, se doctoró en Psicología y es especialista en Psicología clínica.

Ha publicado cuatro novelas y la biografía Herta Müller. Una escritora con el pelo corto (Zut, 2021). Como traductora, destacan sus traducciones de William H. Gass (En el corazón del corazón del país) y Elizabeth Hardwick (Historias de Nueva York, Seducción y traición, y Herman Melville. Una biografía).

Colabora regularmente en Jot Down, Letras Libres, Cuadernos Hispanoamericanos y Revista de Libros.